martes, 13 de diciembre de 2011

Capitulo 2.



Los días siguientes Alba y yo no dejamos de hablar de Blas y Álvaro para variar, porque cuando se nos metía algo entre ceja y ceja no dejábamos de hablar de eso hasta que encontrábamos otro tema del que hablar.

Al final decidió llamarlo, se encerró en el cuarto de baño, y cerró la puerta con pestillo. Al cabo de unos minutos salió con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Qué te ha dicho?- Le pregunté, pero no sirvió de nada porque enseguida se puso a chillar como una histérica, tal y como hacía siempre.
Así que respiró hondo y dijo

- Mañana hacen un concierto en Barcelona.
- ¿Y eso que quiere decir?
- Eso quiere decir que nos han invitado, y me ha dicho que el de seguridad nos dejará pasar si vamos las últimas.
- ¿Pero qué pintamos nosotras en su concierto, si ni siquiera sabemos que cantan y casi no les conocemos?
- ¿Y qué más da?-Dijo sin dejar de sonreír- ahora ya tengo una excusa para hablar con él, y además no me negarás que tu no quieres ver a Blas.
- Eso no tiene nada que ver.- Le respondí sin poder evitar sonreír, la verdad es que verlo no me importaría en absoluto - Además el concierto estará lleno de fans histéricas con sus nombres pintados en la cara, y camisetas con sus fotos, persiguiéndolos y gritando, así que no tendrás tiempo de hablar con él.
- Vamos a ver, - Dijo suspirando - si nos han invitado es porque nos dejarán pasar al backstage, y además Álvaro me ha dicho que después le podré invitar a tomar algo. – Ella seguía hablando sin dejar un solo segundo de sonreír -  Y eso quiere decir que sí que podremos hablar con ellos.
Se dirigió a su habitación mientras decía - Además digas lo que digas esa vez no me harás cambiar de idea, y sé que tienes las mismas ganas de ver a Blas que yo a Álvaro.
Ya todo estaba perdido, cuando Alba se obsesionaba con algo no se lo podías sacar de la cabeza.

- ¿Adónde vas?- le pregunté siguiéndola.
- ¿Tu qué crees? A aprenderme las canciones, no querrás que vaya y me quede callada.
- Aunque no te las supieras tu no podrías estar callada.

----------
En el fondo tenía razón no pintábamos nada en el concierto, pero me daba igual, Álvaro me había invitado y además me moría de ganas de volver a verlo, y le debía un frapuccino - pensé riéndome.

No hay comentarios:

Publicar un comentario